22 de noviembre de 2007

UN RESUMEN




Hasta el siglo XIX la pintura era una representación de lo exterior figurativo aunque la intermediación del artista hacía que esa acción o suceso exterior se trasladase al lienzo de forma que no fuera una simple y vulgar mímesis.

A principios del siglo XX se descubre que la realidad es más honda, está imbuida de ribetes ontológicos y por lo tanto requiere superar los moldes de la representación hasta ahora vigente. Y que debe ser autónoma para configurar su propio orden. Es la culminación de un nuevo lenguaje, que establecerá nuevos planteamientos y problemas, fundamentalmente los relativos a sus enfoques formales o expresivos.

Por consiguiente, la impronta formal con sus leyes geométricas y la expresiva con la pulsión del color y del elemento gráfico abrían un campo alejado de la anterior fisionomía figurativa. Como subrayaba Moreno Galván, la lucha antifigurativa tenía como finalidad el dejar aclarada la existencia de una realidad no condicionada por la representación.

A partir de ahí confluyen todos los ismos, incluido el figurativo, que seguirá vivo pero con una conformación que nace de ese concepto de realidad total.

1 comentario:

  1. Aunque soy muy joven, tal vez demasiado. Cuando mi padre y mi madre con el deseo de que enriqueciera mi formación como artista plástico me propusieron leer este Blog, pensé que sería algo más dentro de los tantos que se encuentran en la Internet o que sería una clase más pero mi sorpresa fue que con mis apenas doce años puedo identificarme plenamente con lo que hasta ahora he encontrado.
    Agradezco mucho al señor Gregorio Vigil-Escalera que ponga en mis manos tanto conocimiento de una forma tan profunda pero a la vez sencilla para su comprensión.
    Leonardo V.

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