2 de marzo de 2009

MANUEL VIOLA / ABSTRACCIÓN Y MUNDO


Paul Klee nos dejó en su diario las siguientes anotaciones:


"Cuanto más espantoso es el mundo (como hoy, precisamente) tanto más abstracto el arte.....Abandonemos estas zonas del más acá para construir por encima de ello un más allá en el que todo pueda ser afirmación. Abstracción".


Es decir, la abstracción es una interioridad que se manifiesta con un nuevo espíritu, aquél que ha de levantar un mundo sobre otros principios estéticos y plásticos.


Y Manuel Viola, parece que haciéndose eco de ello, recoge en su obra el fuego y el estallido de ese espíritu recobrado, a través del cual, liberándolos, permite que se desparramen en vuelos fugaces, que deletreen vientos ignífugos, que tracen una tesis de como plasmar la reivindicación de una lengua que tiene un pincel que fermenta impensables oasis de armonía.


Eduardo Subirats dice que "la abstracción hunde sus raíces en el suelo de la destrucción, de la cual pretende evadirse como su contrario, como el portavoz excelso de una nueva positividad". En ese caso, este artista sería uno de sus paradigmas.


Mi amigo y pintor Humberto Viñas lleva a unos clientes libaneses al malecón y ya en él les pregunta si quieren sueño o realidad en las obras que le han encargado. Ellos le contestaron que ni uno ni lo otro, únicamente deseaban un mar antillano que no contuviese restos de odio ni de sangre.


PAUL CADDEN (1964) / NO SIN EPITAFIOS