Un breve paseo por obras y artistas que infunden otra forma de mirar. Es una aproximación cuyo deseo es provocar otras emociones más íntimas y cercanas si cabe.
28 de agosto de 2008
EL CARDENAL
27 de agosto de 2008
JOSÉ LUIS FAJARDO
25 de agosto de 2008
LIBERACIÓN
21 de agosto de 2008
CÁNDIDO MONGE
20 de agosto de 2008
BALZAC
6 de agosto de 2008
ANDRÉS PIATEK
5 de agosto de 2008
EXORCISMO
4 de agosto de 2008
ESPACIO PARA UN SUEÑO
1 de agosto de 2008
CÉLULAS EMPOTRADAS
31 de julio de 2008
LA JUSTICIA DE LA MEMORIA
- ¡Cuántas obras y artistas no hemos apeado de nuestra memoria e imaginario! Muchos, quizás demasiados, ¿o es que son excesivos para que naveguen por el recuerdo?
- Esta pequeña obra maestra fue pintada por Mariano Fortuny unos días antes de morir. Un desnudo que prueba su exquisita sensibilidad y maestría en la materialización de una carnalidad que reposada en ese mar de jade se convierte en un territorio en el que la voluptuosidad y la sensualidad entonan un canto a la belleza y la vida.
- Y este desnudo de la "mantilla y el clavel" de Zuloaga resplandece por sí solo aunque nos evoque semblanzas goyescas o las densidades de Romeros de Torres. La pose chulesca pone de manifiesto un cuerpo de belleza gitana que está a la espera de demostrar que la praxis no tiene otra filosofía que la de la entrega plena. Y que al espectador no le queda otra opción que contemplarla sin poder hacerla suya aunque en cierto modo siempre le quedará un instante para invocarla.
- Dos maléficas apsaras recorren insaciables el malecón, con sus movimientos incitadores atraen a íncubos y súcubos del fondo de la negrura y cuando ya los han congregado, excitan sus instintos para instigarlos a que conduzcan a las tinieblas a los resistentes que se lamentan ante el muro de su impotencia y fragilidad. Yo escapo porque prefiero las penumbras con desdichas antes que los abismos bienaventurados.
30 de julio de 2008
MOMENTO ESTÉTICO
29 de julio de 2008
BRONZINO
28 de julio de 2008
KUPKA
24 de julio de 2008
ART BRUT
23 de julio de 2008
PRIMER AUTORRETRATO
22 de julio de 2008
VAGÓN DE TERCERA CLASE
21 de julio de 2008
EL TRIUNFO DE LA MUERTE
- En esta obra de Valdés Leal, "El triunfo de la muerte", la osamenta, ese desnudo integral del que nadie disfruta, rodeada de innumerables objetos eclesiásticos y suntuosos, símbolos de la vanidad de la existencia, es un signo religioso e ideológico que a través de una representación sombría, entre lo fantástico y lo real, suscita temor, subyugación, rezo, recogimiento y virtud. Juega con el umbral de un futuro al cielo, purgatorio e infierno.
- Por el contrario, este cadáver, producto de la técnica de la "plastinación" practicada por Gunther von Hagens, da lugar, al mirarlo, a un cúmulo de sensaciones desprovistas de cualquier idea de trascendencia. Ya estamos ante otros hábitos visuales y sus correspondientes significados.
- Dos épocas y dos contextos históricos, sociales y artísticos muy diferentes, pero son dos ejemplos de proyección a una cultura de masas, que en el primer caso se dirige a un espectador que es ignorante y está aterrorizado, aunque se le exige total reverencia. Mientras que en el segundo, el efectismo, la morbosidad y la sorpresa se alían para configurar los elementos propios de un lenguaje afín a su tiempo.
- Dos visiones, dos escenarios que se complementan y formulan dos síntesis y dos sintaxis, en las que la tecnología y la ciencia señalan un antes y un después.
- Hoy, el malecón, en lugar de desnudarse al llegar la noche, se ha vestido y acicalado. No quiere que sus habitantes lo encuentren melancólico y desdeñoso, pues tiene que atraerlos para devorarlos, sobre todo cuando son vírgenes y les queda mucho por gozar. Cuando están dentro de su seno los acaricia y penetra y no deja que emerjan hasta que ya son su propia metamorfosis.
- A los que estamos en la eterna penumbra no nos molesta, al fin y al cabo somo seres que sobrevivimos invisibles en la sombra.
18 de julio de 2008
FRIDA DE DIFUNTOS
16 de julio de 2008
RETRATO Y PERFIL
Me he mirado y me he reconocido sin dificultad. Asgern Jorn, el artista danés de COBRA, me ha devuelto un perfil y un retrato ambivalentes que creía perdidos. Y además mediante una técnica como la de collage, gracias a la cual tú mismo eres capaz de reconstruirte.
Y recobras esa disposición de adentrar en el enigma de tu cabeza pegando recortes de papel que articulados sufren una metamorfosis, en virtud de la cual tu realidad y la suya son una misma.
Sus mínimos rasgos dan fe de tu fragilidad y fealdad, de tu débil naturaleza, de una historia cuyo final se desvanece en la locura.
Son resumen, y también sarcasmo, y además una continua transgresión de unos valores que se han erigido como eternos aunque se hayan corrompido después de tanto exponerse por una senda extraviada.
Y yo sigo padeciendo la soledad del vagabundo en un malecón que no se despierta nunca. De noche sueña y vive, de día duerme para no ver los fantasmas hostiles que se arriman a sus muros en busca de la carroña que el alma nocturna ha abandonado en la lepra de sus piedras.
Cuando la luz alcanza la penumbra, tomo un trago de ron y comienzo la ruta de regreso, siempre por la sombra, no vaya a tropezar con una claridad que ciega primero y mata después.